
The Last Of Us es la adaptación para HBO Max del famoso videojuego con el que comparte título. El avance de los capítulos desde su estreno el día 16 de enero no ha dejado indiferente a nadie.
Las redes sociales se han inundado de comentarios alrededor de una cuestión: los personajes principales pertenecen al colectivo LGTB+. Un ejército de fans apoya a nuestro colectivo en la lucha contra la LGTBIfobia.
La serie protagonizada por Pedro Pascal y Bella Ramsey se ubica dos décadas después de la destrucción de la civilización.
El desencadenamiento de una pandemia mundial que convierte a las personas infectadas en caníbales provoca que Joel, uno de los supervivientes, deba sacar de la zona a escondidas a Ellie, una adolescente de 14 años que también ha sobrevivido. Ellie es inmune a la enfermedad y es la única esperanza para encontrar una cura.


Representación LGTB+
En su episodio número tres, Long long time, se desarrolla la historia de amor entre dos hombres, Bill, interpretado por Nick Offerman, y Frank, interpretado por Murray Bartlett.
Solo por eso su puntuación en la web Metacritic cayó en picado. Mientras que la serie siempre se había posicionado cerca del 10, el capítulo solo consiguió una valoración de 4,8, situándolo como el peor de la temporada.
Offerman respondía en redes sociales ante el rechazo a su interpretación:
“tu tipo de ignorancia y odio es exactamente la razón por la que hacemos historias como esta”.
En The Last Of Us, la homosexualidad aparece representada a través de los personajes Ellie, protagonista de la historia, y Dina, otra de las supervivientes. Hacia ellas también se ha dirigido un aluvión de críticas LGTBIfóbicas.
El contenido LGTB+ del videojuego fue, incluso, vetado en algunos países. Sin embargo, ella se siente arropada por su ejército de seguidores defensores de nuestro colectivo LGTB+ que luchan contra este tipo de ataques.

Históricamente, la representación LGTB+ en personajes de series, películas o videojuegos no ha sido algo común ni generalizado.