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El Pasaje de Begoña: Lugar de Interés Turístico de Andalucía

El Pasaje de Begoña, un lugar de desahogo y libertad sexual para miles de personas en la época de la oscuridad franquista, es declarado Lugar de Interés Turístico de Andalucía

La década de 1960 en la Costa del Sol es sinónimo de un régimen diseñado para establecer la llamada imagen de libertad. En aquel momento, Torremolinos comenzó su desarrollo urbanístico y se caracterizaba por una búsqueda de lo liberal en una España que parecía comenzar a ver la luz entre la oscuridad que opacaba aquellos años.

En el año 1962 en Torremolinos, anunciaba su apertura el primer bar gay de todo el país, el Tony’s. Se inauguró a partir de este momento, un tiempo de transición en búsqueda de aquella libertad sexual. El Pasaje de Begoña, casi desapercibido entre las calles malagueñas, fue el punto 0 de la vida nocturna de malagueños y turistas hasta el año 1971.

Tiempos de franquismo

El Pasaje de Begoña era conocido por las visitas habituales de muchas de las celebrities de la época: Nati Abascal, Sara Montiel o Massiel. También era habitual lugar de paso de algunos intelectuales, políticos o estrellas internacionales como John Lennon o Michael Crawford.

La asociación que lleva su nombre a día de hoy, de la cual Jorge Pérez es presidente, rememora aquellos tiempos como «un auténtico oasis de libertad». Ramón Cadenas, propietario del bar La Sirena y testigo del auge de este pequeño callejón, comenta algo similar a Pérez: «No existía en el mundo un lugar tan maravilloso y diverso, en especial para el colectivo LGTB+, como aquel».

En aquella burbuja caracterizada por la libertad (inconcebible en tiempos de franquismo) y entretenimiento, convivían personas heterosexuales, lesbianas, homosexuales, bisexuales y trans. En aquel entonces estaba bastante extendido en toda la sociedad el uso de motes o alias. Esto era para evitar que fuera de esta burbuja se señalara a aquellas personas cuyos comportamientos podrían ser considerados amenazantes en aquella época.

Esto no deja de ser más que un ejemplo de estrategia de resistencia por parte de estas personas; que se vieron obligadas a ser fuertes y luchar (durante un tiempo a escondidas), por una libertad injustamente arrebatada.

Pasaje Begoña

El Pasaje de Begoña: Su historia

Lo que es cierto y que a veces no pensamos, es que hace tan solo 50 años de esta época, es por ello que la historia del pasaje se sigue manteniendo viva. A su vez, la labor investigadora que desde la Universidad Pablo de Olavide y otras entidades se sigue realizando ayudan a mantener viva la llama de este callejón.

El pasado año, José Antonio Sánchez Medina, realizó un conteo de visitantes a esta zona de Torremolinos. Durante julio, agosto y septiembre, se registraron más de 5.000 visitantes. Esto llevó al catedrático a finalizar su investigación con la conclusión de que: «Sin ningún género de dudas, el lugar cumple con todos los requisitos para ser declarado Lugar de Interés Turístico de Andalucía«.

La Universidad sevillana Pablo de Olavide, junto con la Asociación Pasaje de Begoña, realizaron un estudio histórico del lugar con el título: «Descubrir lo que fuimos para comprender quiénes somos»; con la participación del Laboratorio Iberoamericano para el Estudio Sociohistórico de las Sexualidades.

La redada

Si hay una fecha que marcó al Pasaje de Begoña, fue el 24 de junio 1971. El Gobernador Civil de Málaga, Víctor Arroyo; dio la orden a la Policía franquista de arrestar a 114 personas. El delito cometido fue el de ser «peligrosos sociales» debido a su orientación sexual y haber atentado conta «la moral y las buenas costumbres«.

Aquella noche en el Pasaje de Begoña había un total de más de 300 personas. Los turistas que encontraron fueron deportados con inmediatez; y a todas las personas identificadas se les creó un expediente y sufrieron amenazas por su «conducta inapropiada«.

Aquel, fue el día de la muerte del pasaje. Hoy en día los locales, que miden menos de 30 metros cuadrados, están inutilizados como bares. Lo que sí encontramos es un gran mural recuerda que Begoña fue un ‘paraíso’ durante años para las personas LGTB+ de la España franquista.

Este lugar con tanta historia a sus espaldas supuso un hito en la consecución de derechos del colectivo LGBT+. Jorge Pérez recuerda que existe un hermanamiento con el bar Stonewall Inn de Nueva York: «Hay muchas similitudes, porque en aquel lugar también hubo una redada» que dio comienzo al movimiento de liberación LGTB+. Que es el motivo de este hermanamiento.

Pasaje Begoña

 

El Pasaje de Begoña: Su nombre

En el año 1981 el Consistorio reemplazó el nombre del pasaje por el de Gil Vicente, pero su nombre inicial nunca se olvidó. Así es, que a finales del año 2019, se consiguió recuperar el nombre original del pasaje. Ayudando a recuperar así la esencia de un lugar referente de libertad durante el franquismo.

El 1 de diciembre de ese mismo año, se declaró al pasaje como lugar de Interés Turístico de Andalucía. Además, desde la Asociación Pasaje de Begoña se comenzó la tramitación para su declaración como Lugar de Memoria Histórica y Democrática. En palabras de su presidente este segundo expediente tardará más en resolverse: «En este caso hay un equipo de historiadores y los trámites son más lentos».

Hoy en día

Durante mucho tiempo el pasaje se transformó en un lugar oscuro, antagónico a aquella luz que le caracterizó en su época dorada. La libertad se apagó. Pero hoy, gracias al reconocimiento como ‘Lugar de Interés Turístico de Andalucía’, su memoria vuelve a estar algo más iluminada.

Pilar Márquez

Periodista. Youtuber en proceso. Amante de la música y el arte en todos los ámbitos y defensora de causas sociales.

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