
Tras una espectacular alfombra roja, llegó la noche más esperada de la televisión estadounidense: la gala de los Emmy 2018. Este año no ha habido grandes sorpresas, aunque la nuestra ha sido la cantidad de nominaciones y premios en los que se incluían series LGTB+, como Will & Grace, American Crime Story: El Asesinato de Gianni Versace o el reality RuPaul’s Drag Race.
Juego de Tronos ha recuperado el lugar que se merece: Mejor Drama. Aún así, hubo una miniserie que triunfó por encima de todas en la gala de los Emmys 2018: American Crime Story: El Asesinato de Gianni Versace. La biopic sobre la vida de Versace y su asesino, Andrew Cunnanan se llevó el premio a Mejor Miniserie, así como al Mejor Actor en Drama: Darren Chris, protagonista de la misma. Ryan Murphy, su director también consiguió el galardón por dicha serie como Mejor Director de Miniserie.

Asimismo, nuestro querido RuPaul consiguió también su preciada estatuilla dorada. El programa RuPaul’s Drag Race consiguió el aplauso de los jueces, y se coronó como el Mejor Reality de la televisión norteamericana. Pero lo mejor de todo es que Rick y Morty fueron los que dieron el premio. Los protagonistas de la serie animada más loca de la televisión también consiguieron su estatuilla (viviente o no) por la Mejor Serie de Animación.
Sin embargo, a pesar de las victorias, los Emmy nos han dejado también un sabor amargo. El resto del reparto de American Crime Story: El Asesinato de Gianni Versace que estaba nominado en diferentes categorías, como Penelope Cruz, Ricky Martin, Edgar Ramírez y Finn Wittrock no obtuvieron finalmente su estatuilla.
Lo mismo ocurrió con Sarah Paulson, que estaba entre las favoritas a mejor actriz principal de miniserie por American Horror Story: Cult. Tampoco pudo ser la noche de Megan Mullally, nominada a Mejor Actriz Secundaria de Comedia por Will & Grace.
A pesar de ello, los Emmy 2018 han reconocido que la cultura LGTB+ puede y debe ser premiada, por su calidad, por sus actores, directores, guionistas productores… y, sobre todo, por hacernos día a día más visibles en la sociedad.