
Desde que EEUU emitiera en 2009 la primera temporada de RuPaul’s Drag Race, las drag queens comenzaron a abrirse paso en la televisión. Si bien es cierto que en un primer momento la televisión estadounidense fue la primera en apostar por este tipo de programas, que se emitían en canales de la tv por satélite (concretamente en Logo, un canal dedicado al público LGTB+), en la actualidad, cada vez más grupos mediáticos están apostando por este tipo de formatos.
Y es que los talent shows son programas que “enganchan” a las masas. Es entretenimiento puro. ¿Y qué puede entretener más que un grupo de drag queens enfrentándose a pruebas como pasarelas, lip syncs, retos de actuación, comedia o diseño? Quizás sea esta la clave del éxito de este tipo de formatos: la versatilidad. Y es que, la versatilidad en todos sus ámbitos suele gustar y ser divertida.
RuPaul ha abierto el camino para que en todo el mundo se hagan versiones de su programa. Algunas de estas tienen el beneplácito de World of Wonders, la productora norteamericana LGTB+ por excelencia, como han sido las versiones de Drag Race que se han llevado a cabo en Tailandia, Reino Unido, Canadá, Holanda, Australia y Nueva Zelanda, España y más recientemente Italia. Otras productoras también han apostado por este tipo de formatos, como son el ejemplo de La más Draga en México, que cuenta ya con cuatro temporadas, y The Switch en Chile.
La revolución drag en las pantallas españolas: el éxito de Drag Race España
Fue el 30 de mayo cuando por fin las drag queens españolas tuvieron la oportunidad de llenar los televisores de risa, fantasía y divineo. Durante la primavera y el inicio del verano tuvimos la suerte de ver a artistazas como Carmen Farala, Sagitaria, Killer Queen y otras muchas más superándose a sí mismas cada domingo. Drag Race España ha sido una de las apuestas más arriesgadas de Atresmedia. Un riesgo que el público ha sabido apreciar y con el que la audiencia ha estado encantada. El programa se ha hecho con ¡más de 10 millones de impresiones en redes sociales desde su estreno! Y se ha convertido en la adaptación de RuPaul’s Drag Race mejor valorada por los usuarios de todo el mundo, según muestran los datos de IMDb.
Tanto ha sido el éxito de Drag Race España que durante todo el verano y el otoño de 2021, las concursantes del talent dejaron atrás la pequeña pantalla para llenar de luz y color grandes salas de teatros con el espectáculo El Gran Hotel de las Reinas. Supremme De Luxe dirige un lujoso hotel donde nuestras travestis favoritas se alojan. El espectador va entrando en cada una de las habitaciones y estancias, descubriendo diferentes puestas en escena que le dejarán con la boca abierta.
Y esta apuesta de llevar a las drags queens a los teatros, ¡también ha cosechado grandes éxitos! No hemos parado de ver este verano vídeos en las redes sociales de niños y niñas seguidores del formato que se han adentrado en el Hotel de las Reinas con sus familiares. También hemos visto a señoras y señores de todas las edades que han expresado su más sincera admiración a Supremme y a todas las reinas.
Pero la revolución drag no se va a quedar en solo el formato Drag Race. Las travestis han inundado nuestros televisores, y, de momento, pretenden quedarse. Atresmedia lanzó las pasadas fiestas el especial Una navidad con Samantha Hudson, una adaptación muy queer de la famosa obra Cuento de Navidad, con cameos de personajes de la cultura LGTB+ española, como Paco Clavel, Yurena o Manuela Trasobares, entre otros muchos.
Asimismo, fuera de nuestras fronteras también hemos vivido el fenómeno Queen of the Universe, una especie de Factor X o La Voz, donde drag queens de todo el globo terráqueo muestran todo su potencial cantando en directo. Grandes performances y mejores voces es lo que podemos ver en este talent en el que encontramos como jurado a artistas de la talla de Leona Lewis o Vanessa Williams.
https://www.youtube.com/watch?v=wls3BiTBZug
De todo esto solo podemos sacar una conclusión, una frase que nuestra querida RuPaul lleva diciendo desde hace años: “Drag Race une a las familias”. Y estos nuevos formatos televisivos, que incluso traspasan las pantallas, acercan nuestra cultura, nuestros sentimientos, nuestras vivencias, a un público mucho más general.