
Quitémonos prejuicios de encima y disfrutemos del sexo con naturalidad. Como debe ser. Y uno de los complementos perfectos que nos pueden ayudar a ello son los lubricantes.
Lubricantes los hay de muchos tipos. De aceites, de grasas, secos…pero los más recomendados son los de base acuosa ya que está considerado como una de las mejores opciones para favorecer la lubricación íntima. Además es ligero, no causa manchas y en la mayoría de los casos son compatibles con los condones.
Además este tipo de lubricantes no provocan reacciones alérgicas ni predisponen a infecciones.
También podemos jugar en el sexo con ellos. Es el caso de los lubricantes para masajes que ofrecen por ejemplo desde Durex. Estos tienen como principal función estimular, de una manera más efectiva, las relaciones sexuales.
Este producto se encarga fundamentalmente de facilitar la penetración logrando que esta sea más suave y placentera. De igual manera, este lubricante combate eficazmente cualquier tipo de molestias y dolores que se originan debido a la sequedad en las zonas íntimas.
Cuenta con propiedades hipoalergénicas que permiten un uso completamente compatible con cualquier tipo de preservativos. La textura suave del producto tiene como función aumentar las sensaciones de placer durante las relaciones sexuales.
Si lo que se deseas es tener distintas sensaciones, existen lubricantes que combinando los efectos de calor y de frío harás que lo pases en grande con las experiencias placenteras que aportan estos productos a las prácticas sexuales
Y también encontramos otros con sabores. Este tipo de lubricantes aumentan la delicia del placer en las relaciones de pareja. Estimula la lubricación haciendo más divertida para esos momentos dulces e íntimos de las relaciones sexuales, dando sabor al sexo en todos los sentidos.
Tampoco podemos olvidar que existen otro tipo de productos en el mercado, además de los lubricantes cuyo fin es conseguir una mayor excitación o experiencias más deleitosas que incluso se utilizan en tratamientos para trabajar a modo de terapia para quienes sufren de algún tipo de disfunción sexual
¿Cómo usamos los lubricantes en nuestras relaciones sexuales? O mejor dicho ¿cuál es la mejor manera de utilizar el lubricante?
Pues podemos ofrecerte algunos ítems que puedes tener en cuenta si eres nuevo a la hora de emplear lubricantes en tus relaciones sexuales.
En primer lugar, utiliza la cantidad adecuada para ti. Esta depende tu propio gusto, y de la persona con la que vayas a practicar sexo. Al principio, es mejor que sobre que no que falte para que sea más placentera y apenas sin dolor. Así que tu decides.
¿Y dónde aplicamos el lubricante? Pues en primer lugar el lubricante se debe aplicar tanto en el pene como en el ano o la parte del cuerpo que se vaya a utilizar. Cuando lo vayamos a aplicar en el ano hay que lavarse las manos, tomar el lubricante con el dedo y luego «gelificarlo». Aquí se pueden hacer los primeros intentos de estiramiento, con la pareja penetrando primero con uno y luego con dos dedos para distribuir el lubricante.
Ya puestos en el asunto en sí , debes saber que el lubricante no nos garantiza la fácil inserción del pene o que esta sea indolora. Lo mejor es ir con cuidado al principio, de manera suave, teniendo en cuenta las señales del compañero sexual que tengamos.
Por último, lávate tras el sexo. Los lubricantes con base acuosa son fáciles de retirar tras su uso. Este se puede lavar fácilmente con agua. Los residuos más resistentes también pueden eliminarse en la ducha.
Y para que ya disfrutes a tope del sexo en este verano, te recopilamos algunos consejos de higiene íntima para nuevas sensaciones y experiencias
Deja volar tu imaginación en el sexo y cumple alguna que otra fantasía sexual este verano. Lo mejor es la complicidad en el sexo para que disfrutemos a tope con él de una manera sana y natural.
Si te apetece déjate llevar y emplea algún juguete sexual, seguro que además de disfrutar, lo pasarás en grande experimentando nuevas sensaciones.