
Liberace empezó a tocar en emisoras de radio, teatros o cines y, más tarde, en locales de striptease. Él mismo comenzó a dar forma a su estilo tan característico definiéndolo como “interpretar música clásica eliminando las partes aburridas”.
A pesar de su virtuosismo ante el teclado. Gran parte de su popularidad se debía al personaje que Liberace había creado. Un músico hábil y divertido sin miedo a la exuberancia kitsch.
Se presentaba en escena con llamativos trajes de lentejuelas, y espectaculares abrigos de visón. Todo era rotundo y alejado de elegancia,su modo de interpretar los clásicos a velocidades galopantes,le valió varios récords. Guinness por pulsar las teclas más de seis mil veces al minuto.
El jefe de prensa del artista enviaba comunicados en los que afirmaba que Liberace era «Un caballero, galante con las damas y que si aún estaba soltero, era porque no había encontrado a la mujer ideal». Declaraciones que eran repetidas en las entrevistas del pianista.
Esta autopia termino a finales de los sesenta cuando el periódico británico Daily Mirror sugirió que el artista era gay. Ante semejante afirmación, se demandó a la publicación.
Liberace conoció a Scott Thorson cuando solo tenía dieciséis años. Un día me dijo “Scott, tienes el trabajo más importante de toda mi empresa: hacerme feliz y agradarme”. Convivieron juntos durante seis años a pesar de las rarezas del pianista, el cual convenció a Scott para realizarse varias operaciones estéticas para parecerse a él y así hacer creíble el rumor de que eran padre e hijo.
La pareja rompió en el 1982 y los medios de comunicación, que esperaban impacientes el escándalo en torno al músico, se lanzaron a publicar todo aquello que Scott quiso contarles. Además de interponer una demanda contra el artista en el que le exigía noventa millones de euros, Scott escribió un libro sobre su vida con el pianista titulado Behind the Candelabra: My Life With Liberace.
Liberace decidió aparecer en televisión para lavar su imagen, aunque se mostró simpático, evidenciaba un aspecto demacrado. Un hecho que no pasó desapercibido para los espectadores ni los periodistas, que no dudaron en publicar lo que muchos sospechaban.
Pocas semanas después, el 4 de febrero de 1987, Liberace fallecía en su casa de Palm Springs por una infección derivada del VIH. Liberace Foundation, institución creada por el showman en 1976 y que, desde que cerró el museo dedicado al artista en Las Vegas, trabaja por mantener su legado. Además de conceder becas de perfeccionamiento para jóvenes músicos, conserva, salvaguardia y restaura las miles de piezas que forman el patrimonio de Liberace.