
Pongámonos en antecedentes. El pasado 2 de diciembre hubo elecciones en Andalucía con los siguientes resultados: PSOE (33 escaños), PP(26), CIUDADANOS(21), ADELANTE ANDALUCÍA(17), VOX (12 escaños).
Estos datos han permitido a que se intente formar gobierno por parte de un bloque de derechas entre Partido Popular y Ciudadanos (lo siento, pero Ciudadanos es tan de derechas como el PP, aunque ahora el PP de Casado se esté convirtiendo en más radical). Para conseguir formar este gobierno deben alcanzar la mayoría (55 escaños), solo asumible si el partido de ultraderechas, Vox, vota a su favor.
Esto ha permitido tener a los de Abascal (así se llama su líder) creer tener las llaves para la consecución de este cambio de gobierno en la Junta de Andalucía. Así que ellos (sí, ellos con ‘o’ porque son hombres de verdad) han elaborado un documento con 19 exigencias si quieren que Juan Manuel Moreno sea el nuevo Presidente andaluz.
De todas las exigencias, nos detenemos en dos:
- Derogación de la «Ley 8/2017, de 28 de diciembre, para garantizar los derechos, la igualdad de trato y no discriminación de las personas LGTBI y sus familiares en Andalucía«.
- Derogación de la «Ley 13/2007, de 26 de noviembre, de medidas de prevención y protección integral contra la violencia de género
- Derogación de la «Ley 12/2007, de 26 de noviembre, para la promoción de la igualdad de género en Andalucía«
El motivo de estas derogaciones (estos textos están extraídos de su documento original) según este partido son las siguientes:
- Los derechos de las personas de orientación homosexual están ya reconocidos en las leyes ordinarias y la Constitución. España no es un país «homófobo» que necesite leyes especiales. La Ley 8/2017 atribuye privilegios injustificados a las asociaciones LGTB, como el derecho a interferir en la educación, a contar con órganos específicos en la Administración y a recibir subvenciones.
Sustitución por una Ley de Violencia Doméstica que no prejuzgue el sexo del agresor, respete adecuadamente la presunción de inocencia, no instituya una enorme burocracia «de género» y no facilite la lluvia masiva de subvenciones a las asociaciones de feminismo supremacista. (Especialmente, suprimir en la nueva regulación el art. 30, que permite que la condición de víctima de «violencia de género» sea acreditada, no por sentencia judicial, sino por:
a) Certificación o informe de los servicios sociales y/o sanitarios de la Administración Pública competente; b) Certificación o informe de los servicios de atención a víctimas de la Administración Pública competente; c) Certificación o informe de los servicios de acogida de la Administración Pública competente»; cf. art. 1 bis:
«A efectos de la presente Ley, se considerarán víctimas de violencia de género y tendrán reconocidoslos derechos de esta norma sin necesidad de interposición de denuncia”; también los artículos que ordenan la lluvia de subvenciones a las asociaciones clientelares, como el art. «La Administración de la Junta de Andalucía apoyará las iniciativas de las asociaciones de mujeres», y los que prevén un adoctrinamiento permanente sobre «perspectiva de género» a la infancia y la sociedad en su conjunto: art. 8, art. 22, etc.)
¿En serio? ¿de verdad que España no es un país homófobo?¿de verdad que no existen agresiones por el mero hecho de ser transexual?¿de verdad que no hay odio en las agresiones sufridas por nuestro colectivo?¿de verdad que no mueren mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas?
Si existen estas leyes es porque se necesitan. Y no lo decimos nosotrxs porque nos lo hayamos inventado. Nos basamos en datos que lo demuestran.
- No hay datos oficiales en 2018: En 2017 se registraron 629 delitos de odio a personas LGTBI en España, aunque en el 80% de los casos no se denuncia, según un informe del Observatorio contra el Odio. El País. 29/11/2018
- A poco más de un mes para que terminara el año, era ya 44 las víctimas mortales de la violencia machista en 2018, según el balance del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, actualizado a 21 de noviembre. Por comunidades, la mayor cifra se concentra en Andalucía, donde vivían 12 de las víctimas. EL PAÍS. 24/11/2018
Por supuesto que cada unx vota a quien quiere, pero que no nos engañen. Hay LGTBIfobia (cada día más patente) y lamentablemente cada día siguen muriendo asesinadas mujeres por hombres.
Y lo que más rabia nos da es que seguimos sin entender es que haya personas LGTB+ que voten a este partido alegando que ellos nos defienden; que Javier Maroto del Partido Popular y homosexual negocie con este partido sin problema alguno; que existan mujeres (da igual del partido que sean o de la ciudad que sean) que se alineen con las exigencias de este partido, como por ejemplo: Isabel Díaz Ayuso: «Estoy a favor de romper con la dictadura de las feministas radicales»