
Tailandia está a un paso de aprobar el matrimonio entre personas del mismo sexo. Solo falta que el Parlamento apruebe el Proyecto de Ley de Asociación Civil para que Tailandia se convierta en el segundo país (después de Taiwán) en legalizar las uniones civiles entre personas homosexuales.
Sin embargo, dicho proyecto de ley evita el término «matrimonio», que lo sustituye por «asociaciones civiles». Aún así, la ley permitirá a las parejas del mismo sexo el derecho a poseer conjuntamente propiedades, adoptar hijos y transmitir herencias. Además, para poder contraer matrimonio, lxs componentes de las parejas homosexuales deberán tener más de 17 años años, y un miembro de la pareja deberá ser ciudadanx tailandés. Por su parte, los menores de 17 años deberán obtener el permiso de sus padres o tutor legal para poder «casarse».
Ratchada Dhnadirek, portavoz adjunto del gobierno, ha calificado este proyecto de ley para el matrimonio homosexual en Tailandia como un «hito para la sociedad tailandesa en la promoción de la igualdad entre personas de todos los géneros» y «fortalece a las familias de las personas con diversidad sexual».
La noticia ha sido acogida con alegría por el colectivo LGTB+ del país. Sin embargo, diversos activistas han criticado el proyecto de ley para el matrimonio homosexual en Tailandia, ya que no lo ven totalmente inclusivo. «El proyecto de ley de asociaciones civiles no es un hito para la igualdad de género en Tailandia, sino que es un obstáculo para alcanzar el matrimonio para todos«, dijo Tattep Ruangprapaikitseree, activista LGTB+ y Secretario General de la organización juvenil progresista Free Youth.
Además, Ruangprapaikitseree agregó: «¿Por qué no llamar a todos, parejas tradicionales y no tradicionales, como parejas casadas, por qué se debe asignar un término especial a LGTB+ como » pareja civil «? Esta es otra forma de discriminación disfrazada. No queremos nada especial, solo queremos que nos traten como a los demás».
La candidata a Primera Ministra, Pauline Ngarmpring, ha afirmado que «la base del proyecto de ley de unión entre personas del mismo sexo no se basa en la igualdad. Pero es mejor que nada. Esta no es una lucha que aún no ha finalizado«.
Tailandia es un famoso destino para la comunidad LGTB+ porque, a diferencia de los países vecinos, no criminaliza la homosexualidad y tiene una vibrante y visible comunidad trans. Es también escogido por muchxs para realizar turismo médico en tratamientos y cirugías de reasignación de sexo y así transicionar al sexo sentido. Una de las opciones para obtener información y acompañamiento en los procedimientos médicos es Trasgender Thailand, organización que brinda dichos servicios sin costo.
Los avances se producen pero demasiado despacio. Las personas que no respondemos a lo que el heteropatriarcado esperaría de nosotras tenemos que estar más organizadas, al menos tanto como la gente conservadora, que se reúne un rato todos los fines de semana en sus templos. En torno a una religión atea/agnóstica, no dogmática, feminista, antirracista, ecologista y aliada de los movimientos LGTBIQ, lo conseguiríamos, y seguramente se formarían muchas comunidades.
Para mi, dejando de lado el » GENERO», el amor que sienten dos personas entre si es igual en parejas IGUALITARIAS que MIXTAS.
Deseo que ambas puedan tener los mismos DERECHOS y OBLIGACIONES en Tailandia. Que ambos tipos de parejas sean tratadas por igual ante la ley, ya que un país que trata y quiere a todos sus habitantes nacidos en él, así lo haría y es digno de respeto mundialmente.
Después de casi 46 años de tener una pareja mixta y que amo a mi esposo, aún después de su muerte, deseo que todas las parejan que se elijan el uno al otro, sean Mixtas o Igualitarias, tengan el derecho para vivir juntas y a ser felices ante la ley como un matrimonio, una ley que los reconozca como tal y los proteja.