
Tras la presión internacional a raíz de que se hiciese público en nuevo código penal de Brunei basado en la sharia (ley islámica), el sultanato ha cedido. El sultán Hassanal Bolkiah ha dado un discurso televisado con motivo del inicio del mes de Ramadán en el que aclaró que se que extenderá una moratoria sobre la pena capital para los delitos como «la homosexualidad».
“En las últimas dós décadas, hemos practicado una moratoria de facto a la ejecución de la pena de muerte en casos de ley común. Esto se aplicará también en los casos de la sharia que ofrece un amplio margen de exoneración”, aclaró el monarca.
En Brunei, el Código Penal ya contemplaba desde hacía años la pena de muerte para delitos como el asesinato premeditado o el tráfico de drogas. Pero, desde el año 1957 no se ejecuta a nadie en el reino. Los manifestantes contra la nueva ley basada en la sharia temían que esto cambiase, y el nuevo Código Penal fuera más duro y se volviera a ejecutar a los condenados.

Este nuevo Código Penal ha sido criticado internacionalmente y famosos como George Clooney o Elton John defendieron públicamente un boicot hacia las cadenas hoteleras que el sultán posee en Londres o en Los Ángeles. Sin embargo, no sabemos si por la presión internacional o no, Hassanal Bolkiah además de haber prometido no condenar a muerte a los homosexuales, ha ratificado la convención de la ONU contra la tortura para “mantener nuestros compromisos y obligaciones internacionales”.
Aunque esta noticia ha sido bien recibida por la sociedad, aún queda mucho por hacer, ya que el sultán no ha mencionado nada sobre otros castigos severos de la sharia. Por ejemplo, los 40 azotes o hasta 10 años de cárcel para las mujeres condendas por mantener relaciones sexuales lésbicas o la amputación de una mano o un pie por haber cometido un robo. En opinión de Phil Robertson, subdirector para Asia de Human Rights Watch, “Toda la ley es una monstruosidad que abusa de los derechos humanos y que debería ser eliminada«.