
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha salido al frente para defender las reformas propuestas en la Asamblea por el Partido Popular con respecto a las leyes regionales LGTBI. En medio de crecientes tensiones, la respuesta de la comunidad LGTB+ no se ha hecho esperar.
Las controvertidas modificaciones provocaron que, el pasado lunes 13 de noviembre, miles de personas saliesen a las calles de Madrid para manifestarse en contra de estas propuestas. La masiva manifestación inició a las 19:00 horas en la Puerta del Sol y fue convocada por más de 30 asociaciones que se opusieron al recorte de las «leyes trans» y contra la LGBTIfobia.

En una rueda de prensa durante la presentación del Plan de Inclemencias Invernales en el Puerto de Cotos (Rascafría), Ayuso se mostró firme en su posición asegurando que las reformas no retiran «un solo derecho» al colectivo LGTBI. Ante las críticas de la izquierda, Ayuso desafiaba que le indicasen un derecho que hubiese sido eliminado. «El problema es que no se ha leído la ley. Simplemente, aquí solo existe una ley y si está mal redactada o hay que actualizarla, pues ya tenemos la polémica», sostuvo.
La presidenta madrileña insistió en que todos los derechos «están en la propia Constitución» y criticó a los partidos de izquierda por «redactar artículos y leyes que no están protegiendo a absolutamente a nadie».
Así mismo, afirmó que las reformas buscan dar voz a profesionales médicos, psicólogos, docentes y jueces «que tienen mucho que decir al respecto». De esta manera, hace hincapié en la necesidad de volver a dotar de la capacidad de decidir en estas cuestiones a las personas especializadas con rigor jurídico y científico, argumentando que se habría creado un «mundo paralelo» que excluía a las personas con experiencia y conocimiento de la toma de decisiones.
Por otro lado, Ayuso desmintió afirmaciones sobre la supresión de sanciones a terapias de conversión, insistiendo en que se acogen a la ley estatal e instando a la ministra de Igualdad, Irene Montero, a «leer la ley antes de hablar».
«Fíjense si habrán trabajado poco y si vivirán tanto de la pancarta y, sobre todo, de colectivizar a los homosexuales que se defienden solos perfectamente», declaraba Ayuso con respecto a la oposición.
La presidenta de Madrid aseguró también que las reformas estaban ya en su programa electoral y que, después de haber sido elegidos por los ciudadanos para gestionar la Sanidad y la Educación en Madrid, no iban a permitir «espacios privados» para que «asociaciones sin límites» tomasen decisiones.
Del mismo modo, subrayó el fracaso que leyes similares han tenido en otros países de Europa, teniendo que ser revertidas por, en palabras de la presidenta, «los daños que han causado especialmente entre los menores».
Ayuso concluyó sus declaraciones expresando su compromiso por la sensibilización y visibilidad de las personas que enfrentan discriminación por cualquier motivo, y con un claro mensaje para el pueblo de Madrid: «se acaba el primer periodo de sesiones y quiero que todas estas leyes se pongan antes en marcha para que tengan recorrido durante la legislatura».