
Pues la verdad es que este Papa no deja de sorprendernos. Cuando el pasado viernes publicábamos que el Papa Francisco iba a emitir la mayor declaración pro-LGBT+ en la historia del Vaticano, el pasado domingo hizo las siguientes declaraciones:
Si los papas empiezan a ver cosas raras en sus hijos, consulten, vayan a un profesional
Con estas declaraciones el papa Francisco quiso aclarar sus palabras de hace algunos días, cuando dijo que los homosexuales tenían que ir al psiquiatra. Asegura que el idioma le falló, y ha matizado que cuando se refirió a un «profesional», quería decir que fueran a un «psicólogo».
El Papa y la homosexualidad… #SalvadosPapa pic.twitter.com/zUJ51832ww
— Salvados (@salvadostv) 31 de marzo de 2019
«Cuando la persona es muy joven, muy pequeña y empieza a mostrar síntomas raros. Ahí conviene ir (…) a un profesional, a un psicólogo que más o menos vea a qué se debe eso», asegura.
De nuevo corregimos al Papa. No son síntomas raros, en serio. Solo es amor hacia una persona de su mismo sexo. Y eso forma parte de la naturaleza. No es una enfermedad, por más que le pese a la institución de la Iglesia. Y no lo decimos nosotros, también lo dice la OMS. Por lo que les animamos a que se actualicen un poco. Sólo un par de siglos…por ejemplo.
Y no son tendencias, es orientación sexual. Estamos seguros que tomarán nota de estas aclaraciones y palabras para que en próximas declaraciones, empleen un lenguaje más correcto.
Otra de las declaraciones sobre la comunidad que se habló en el programa fue la siguiente:
«toda persona tiene derecho a tener un padre y una madre, venga como venga»: «Si hay un caso de homosexualidad, yo comprendo que en una familia eso provoca dolor, pero diálogo. Nunca se echa del hogar».
Como podéis observar de nuevo una de cal y otra de arena. Genial lo de que no se les eche de casa, pero el resto del mensaje, debería revisarlo de nuevo su santidad si quiere empatizar y regenerar la iglesia.
Claro que las personas tienen derecho tener un padre y una madre, pero estos pueden ser dos padres o dos madres, o una madre o un padre. En definitiva, todos debemos tener a alguien que nos quiera, nos eduque, nos cuide y nos proteja. Qué más da la identidad o la orientación sexual de las personas. Lo importante son los valores, el amor y la educación que procesen. El resto, qué mas da.
Aun así, agradecemos al pontífice estas palabras. No, no nos hemos vuelto locos, pero tenemos que ver estas palabras sobre todo desde la perspectiva hacia quienes van dirigidas.
Estas no van a nuestra comunidad, ni tan siquiera al resto de la sociedad. Estas se dirigen hacia las personas cristianas creyentes que siguen su fe.
Si tenemos en cuenta que sus predecesores siempre lanzaron mensajes bastante LGTBIfobos, este mensaje muestra algo diferente (que no positivo).
Esperamos que este tipo de mensajes calen un poco más en la comunidad católica y estas familias cristianas conservadores comprendan a sus hijxs un poco más y no los echen de casa.
Las cosas lamentablemente van muy lentas (y más la iglesia católica) por lo que la comunidad LGTBI deberá seguir trabajando para que la religión se de cuenta que todxs somos personas y que la identidad sexual o la orientación sexual no nos hace diferentes, sino más diversos y ricos.