
En las reuniones los participantes podrán opinar, debatir e incluso demandar aclaraciones sobre los futuros códigos que compondrán la nueva vida en Cuba. Este proyecto busca sustituir el anterior que ha sido vigente desde 1975 hasta la actualidad, planteándose la posibilidad de reconocer el matrimonio gay en Cuba.
Este es el único que irá a referendo entre el resto de leyes que se podrían aprobar en el actual período legislativo. La cuestión ha sido criticada por la comunidad LGTB+. Se considera discriminatoria, si esta se lleva a consulta, el resto de proyectos de ley también deberían. Hay sectores que distan de la visión del gobierno por lo que podrían rechazar algunos aspectos de este nuevo Código de Familias Cubano.
Matrimonio igualitario en Cuba y adopción
De lo más destacable, el probable reconocimiento y consecuente aprobación del matrimonio homosexual. Esta iniciativa salió a la luz en Cuba por primera vez en 2018 que acabó con la promulgación de la nueva Carta Magna durante el anterior proceso de reforma constitucional en 2019.
La anterior Constitución que ha sido vigente desde 1976 no contempla de ninguna forma el matrimonio entre personas del mismo sexo. “Entre un hombre y una mujer”, de esta forma se rechazaba en la anterior constitución la unión igualitaria y por tanto la aprobación del matrimonio gay en Cuba.
Principalmente, en este Código de Familia se pretende conseguir la igualdad en la unión matrimonial y que parejas del mismo sexo puedan adoptar niños. Estos dos objetivos han provocado discusiones y polémica entre la ideología de centro. Hasta hace pocas décadas los homosexuales no vivían tranquilos en Cuba. Eran perseguidos e internados en campos de trabajo por su manera de amar.
Una familia plural
El texto además sustituye el concepto de “patria potestad” por “responsabilidad parental” al defender que la maternidad y paternidad se limite a los padres de los niños. Entonces, se reconoce a cualquier persona que participe en el desarrollo de prácticas educativas en los niños.
El Código de las Familias incluye el concepto de “gestación solidaria”. Este término novedoso para la mayoría de países europeos y para Cuba es una versión de los “vientres de alquiler”. Aquí se especifica qué pasaría si una mujer distinta de quien quiere asumir la maternidad se ofrece por motivos altruistas y sin cobrar a la hija o el hijo de quienes quieran asumir el rol de participar en el desarrollo y cuidado del infante.