Con la de cosas en la que deben preocuparse como el hambre, la pobreza, el amor, el respeto… pero este señor parece que está obsesionado con la homosexualidad.
No es la primera vez que este sacerdote nos muestra su opinión sobre la identidad de genero y la homosexualidad. Pero es que ante las palabras y pensamientos que nos ha dedicado en este nuevo artículo de opinión publicado en ‘Religión en libertad‘ no podíamos quedarnos calladxs.
Bajo el nombre las leyes LGTBI y los homosexuales, encontramos afirmaciones y pensamientos que nos han dejado con la boca abierta.
«La Organización Mundial de la Salud retiró en 1990 la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales, lo que no significa que haya unanimidad entre los psiquiatras sobre esto».
Este siervo de la fe, se dedica durante todo un artículo a defender el derecho de que una persona homosexual pueda cambiar su sexualidad y «convertirse» en heterosexual y cómo las leyes LGTB aprobadas en Madrid o Andalucía lo impiden.
Aquí van otras perlas de su artículo que por supuesto dejan en evidencia su forma de pensar:
Además, si [la homosexualidad] no es ninguna enfermedad ni trastorno, ¿por qué solicitan de la sanidad pública servicios especiales?
«En pocas palabras, si un médico intenta ayudar a un paciente que le pide ayuda para salir de la homosexualidad -y recordemos que cada día hay más personas en el mundo que lo están consiguiendo- se le impide el libre ejercicio de su profesión, porque aunque los hechos digan lo contrario, son los hechos los que están equivocados, nunca la ideología.»
De verdad que no le entendemos. Por más que lo intentamos. La orientación sexual forma parte de la persona. No es una elección que pueda cambiarse como se cambia de jersey. Ser gay, lesbiana, o bisexual es sólo amor por otra persona. Da igual cuál sea su sexo. Y la ideología de la que hablan, la han creado ustedes, al tildar de pecado un sentimiento. Se han creado ‘etiquetas’ porque había que luchar por la libertad, coartada por personas como usted.
Y no hablamos de transexualidad o intersexualidad, porque estaríamos hablando de identidad de genero , y eso es otra cosa. (Le animamos a informarse mucho mejor sobre ello antes de opinar).
Así que déjese de inventarse teorías y déjenos vivir tranquilxs, igual que nosotrxs les dejamos vivir en paz. A pesar de todo el mal que han causado a nuestro colectivo, provocando por ejemplo el rechazo de muchas familias cristianas a sus propias hijas e hijos. ¿Este es el amor que promovéis?
Insistimos que en Togayther somos firmes defensores de la libertad de expresión, pero sin que esta libertad coarte la de los demás.
Así que una recomendación a estos servidores de la fe, promuevan el amor y el respeto. Y por supuesto, antes de criticar hay que limpiar la casa de uno mismo. Y a vosotros, todavía os queda mucho por limpiar y pedir perdón.
