
Un chico de 18 años fue agredido en Huesca a la salida de un bar.
Francisco Abreu, que así se llama el joven de Ayamonte (Huelva), fue agredido la noche del jueves pasado a su salida de un bar del centro de Huesca, donde estudia medicina desde hace apenas dos meses.
Le pegaron un puñetazo en la cara que tuvo como consecuencia una contusión en la cara y el cuero cabelludo y del que fue atendido en el Hospital San Jorge.
El joven denunció los hechos a la Policía Nacional y además lo ha hecho públicamente a través de sus perfiles en redes sociales y en su canal de YouTube, donde dice: “Nuestro delito es tener pluma”. Explica además, que quien le pegó decía que tenía ganas de pegar a alguien, asoció ser gay a ser débil y fue a por mí”.
La agresión se produjo porque una de las amigas de Francisco rechazó a un chico de su misma edad, y éste lo pagó con Francisco. El chico asegura también que antes de la agresión fuera del bar, ya sintió un puñetazo en el hombro.
En declaraciones a eldiario.es/Andalucía, Francisco indica: «Aquí se mezcla el machismo y la homofobia, porque mi amiga le ignoró y él se enfadaría. Supongo que él pensará a ella no le puede pegar, pues le pega al chico afeminado que la acompaña».
Cuando te pegan porque vives en una sociedad en la que ser femenino es ser débil y endeble y eso es excusa suficiente. pic.twitter.com/uZRS5TR9k4
— Paco Abreu (@pacoabreugarca) 28 de octubre de 2016
Para este chico de tan solo 18 años no es la primera vez que sufre una agresión homófoba. Ya en su ciudad natal, Ayamonte, fue agredido por un hombre de 40 años estos motivos.
Como ya hemos comentado en otras ocasiones, las agresiones homófoba desde este verano han ido en aumento y parece que no se frena la tendencia, quizás debido a la falta de leyes que garanticen de verdad la libertad e igualdad de todas las personas.