
Pixar vuelve, un año después de lanzar la galardonada Toy Story 4, con una película totalmente original y que ha estado en boca de muchas personas por mostrar abiertamente un personaje que confirma su homosexualidad. En otras películas recientes de otras productoras, como Frozen 2 o Star Wars, no hemos conseguido ver ese momento LGTBI que tanto se especulaba por todas las redes, por lo que nos sentimos un poco estafados. El próximo viernes 6 de marzo podremos ver el primero explícito y en una película de animación, normalmente dirigida a un público más joven.
Onward cuenta la historia de dos hermanos, Ian y Barley, que se emprenden en una aventura para intentar resucitar a su padre gracias a un hechizo. Se encontrarán con algunas dificultades y, en el camino, se cruzarán con un cuerpo de policías. Ahí entra en acción Specter, la oficial de policía que es un cíclope y que afirma mediante una frase en la película su orientación sexual: «La hija de mi novia me hizo arrancarme el pelo». Este personaje solo cuenta con una escena en la película, pero será muy relevante para el transcurso de la historia. Su voz la hace Lena Waithe, actriz y guionista abiertamente lesbiana.

Respecto a esta escena, la productora Kari Rae comenta que «Simplemente, pasó. La escena, cuando la escribimos, encajaba y nos abría un poquito al mundo, que es lo que queríamos». La película ya ha recibido algunas críticas no demasiado buenas para lo que es Pixar pero, aun así, su director, Dan Scalon, afirma que «Es una fantasía para el mundo moderno y queremos que represente a ese mundo moderno». Ambos creen que la película pasará a la historia de una forma u otra.
Esta será una de las dos nuevas películas que lanzará Pixar en 2020. Respecto a Disney, ya hemos visto que va un poco más atrasada, aunque en algunas películas sí que ha jugado un poco con el tema LGTBI, como en Buscando a Dory, donde veíamos una pareja de chicas empujando un carrito de bebés, o en Toy Story 4, donde se veía otra pareja de chicas que dejaba a un bebé en la guardería; o en el personaje de Valkiria o con la saga de The Eternals.
El mensaje que se debería quedar es el de la lucha constante por visibilizar el colectivo LGTBI en el mundo audiovisual. La representación es minoritaria y sigue habiendo países como Singapur o Emiratos Árabes Unidos donde incluso está prohibida.