
El Fantasma de la Sauna llega a los cines de la mano de su director, Luis de Navarrete —nótese el guiño a El Fantasma de la Ópera.
Más exuberante y con una apuesta original por el escenario —una sauna gay—, la temática combina lo underground y lo oscuro con escenas muy luminosas, aprovechando para ello decoradores reales para mostrar ese contraste que existe en las saunas.

Las musas que acompañan la trama son tres musas: Lujuria, Amor y Arrepentimiento, encarnadas por las drags Supremme de Luxe, Pupi Poisson y Tavi Gallart. Y son ellas quienes elevan al musical a un tono desenfado y picarón para que las secuencias sean las mejores del filme.
Los temas musicales, por otro lado, están bien ejecutados y destaca la potencia del protagonista (Néstor Goenaga) y del fantasma (Martín Spínola, coescritor del guion).
La sinopsis de la película podría resumirse en lo siguiente: Javi (Néstor Goenaga) acude a la Sauna Popular buscando un trabajo para ser cantante, pero la sauna guarda muchos secretos: una dueña misteriosa (Antonia San Juan) y un extraño hombre que vive en los conductos de ventilación (Martín Spínola).
Los personajes
- Javi es carismático e inocente, le pasarán muchas cosas por esa ingenuidad, pero tiene un brillo que impregna la sauna y hace que se llene de sueños. Quiere ser cantante, pero necesita la aprobación de los demás porque siempre se ha visto muy solo.
- El Fantasma es oscuro y duro, pero en su dolor hay una persona indefensa en busca de amor.
- Asun es la villana y su hijo, Darío, está bajo la sombra de su madre.